Con las fechas navideñas a la vuelta de la esquina, las grandes marcas inundan todos los espacios posibles de publicidad masiva, con el único fin de atraer a los consumidores como si de “borreguitos” se tratase a que compren sus productos.
La televisión se convierte en el formato estrella para realizar este tipo de anuncios y cada año tenemos uno o dos spots que llaman la atención por encima de los demás e incluso que se convierten en auténticos fenómenos y dan rienda suelta a un sinfín de interpretaciones por parte de los espectadores.
En España uno de los anuncios más esperados en los últimos años es el de “La lotería de la Navidad”, quien no recuerda la infinidad de bromas que se hicieron con el spot protagonizado por los cantantes Rafael y Montserrat Caballé, entre otros, el año pasado. Tuvo un efecto viral brutal y no precisamente porque le gustara a todo el mundo si no todo lo contrario e incluso hasta la propia Montserrat quedó poco contenta con el resultado del mismo.
OBJETIVO: Despertar emociones
HERRAMIENTA: Publicidad emocional
Con el panorama actual de crisis mundial en el que nos encontramos, que parece ser un paisaje al que nos vamos a tener que acostumbrar, ya que de pasajera tiene poco y se está alargando muchos años, las reglas del juego parece que para esta campaña han cambiado y la publicidad emocional ha sido el formato adoptado.
Las empresas saben que con la publicidad emocional el impacto en la memoria a largo plazo del espectador es mayor y la influencia en su objetividad a la hora de comprar productos de la marca o empresa se ve influenciada negativamente.
Los publicistas buscan llamar la atención como siempre, pero en este caso parece que quieren ir un paso más allá y despertar emociones en el consumidor que le haga reflexionar acerca de otras muchas cosas, aunque el fin lógico sea promocionar un producto o marca.
Hace varios días que se presento el nuevo anuncio de “La lotería de la Navidad” y ha sido un “boom” precisamente por eso, no lo vamos a comentar mucho porque ya todos los habréis visto y aunque la historia en sí es algo cotidiano el desenlace para muchos es “ciencia ficción”. Eso sí el objetivo de despertar emociones (incluso buscar la lagrima fácil) y hacer que el espectador reflexione sobre ello ha sido cumplido con creces.
Nos vamos a trasladar hasta Reino Unido para hablar de otro anuncio para esta campaña navideña que utiliza publicidad emocional para llegar al espectador. Ayer mismo fue presentado el spot de la conocida cadena de hipermercados Sainsbury´s. Con una producción espectacular, casi de película. El anuncio narra la tregua que se llevó a cabo entre soldados británicos y alemanes durante la navidad del año 1914 en el transcurso la I Guerra Mundial. Una historia verídica de la que se puede encontrar mucha documentación ya que se trata de un hecho histórico que demuestra que el ser humano es capaz de lo mejor y de lo peor.
El eslogan utilizado es “Christmas is for sharing” “La Navidad es para compartir” y humaniza un poco esta época que en los últimos años viene convirtiéndose en una simple campaña consumista exenta de sentimientos.
Uno de los mensajes principales que se puede leer es que a veces unos muchos se sacrifican para el beneficio de unos pocos y para los tiempos que corren en los que cada vez se dan más casos de desigualdad, da para pensar.
¿Tú qué opinas? ¿la publicidad emocional te hace reflexionar?